En SMA damos gran importancia a la fase de diseño del proyecto, recabando toda la información posible sobre los requerimientos exigidos y factores limitantes para la implantación de la solución técnica. De esta forma, se procura el aprovechamiento de instalaciones preexistentes, el emplazamiento idóneo para los equipos y el diseño teniendo en cuenta la menor ocupación de superficie posible y una baja necesidad de ejecución de obra civil, de forma que se produzca el menor impacto posible para la población durante la fase de ejecución de la infraestructura y su posterior explotación.
Optamos por soluciones prefabricadas, fácilmente instalables y de bajo tiempo de puesta en marcha. Todo ello para evitar la necesidad de compra de terrenos y el mayor ahorro en la inversión.